Chapter 69
Chapter 69
La situación era realmente tensa. Desde hacía horas estaban intentando controlar a los salvajes, pero parecían más rebeldes que en otro momento que habían rodeado a la manada. Estaban de forma insistente intentando entrar a la manada por lo que ya había algunos lobos junto a él que estaban heridos. Hasta el mismo estaba agotado. Gruñó nuevamente erizando el lomo de los lobos junto a él, sin embargo, los salvajes apenas se inmutaron. Era sabido que al estar en la naturaleza y con el resentimiento de haber sido expulsados o de no haber sido acogidos en ninguna manada no solían tener miedo tan fácilmente. Y Dixon podía jurar que una pelea
directamente podría ser realmente peligrosa.
Los Salvajes eran lobos sin nada que los frenara.
Sin embargo, y cuando pensó que la situación se volvería peor uno de ellos aulló. Los demás salvajes lo miraron y lentamente comenzaron a retroceder hasta dar la vuelta y comenzar a correr. Alejándose. Dixon no supo que había ocurrido exactamente, pero de que algo estaba pasando, estaba. 1 -Alfa- sintió a Will a su lado – Creo que deberíamos quedarnos más tiempo a ver si vuelven. 1 All rights © NôvelDrama.Org.
Dixon estaba de acuerdo, pero desde hacía un tiempo su pecho latía de forma incómoda. Como hacía cuando tenía un mal presentimiento respecto a su mate. Pero ella estaba con su hermano. Podía ser un imbécil, pero sabía que no dejaría que le ocurriera algo a la loba.
-Estúpido hermano. Por qué demonios me mandas a buscar al otro extremo de la manada si estás aquí.
Y como si casi lo hubiera invocado con su pensamiento, Ethan apareció de entre los arbustos. Se mostraba bastante agitado y molesto. Eso activó las alarmas de Dixon.
-¿Qué m****a haces aquí?- le gruñó mostrando todos sus colmillos. Su gruñido hizo que varios lobos a su alrededor retrocedieran. Mientras que Ethan le respondió también mostrando los colmillos.
– Tú me mandaste a buscar, acaso no recuerdas. El lobo a tu lado mandó el recado de que era algo urgente. No me pides ayuda para nada así que creía que realmente era algo serio.
Los ojos dorados de Dixon que casi resplandecían de la rabia se fijaron en el beta a su lado. Will retrocedió dos pasos con la cola entre las patas, Su Alfa parecía que
podría caerle encima en cualquier momento.
-¿Es cierto lo que acaba de mencionar él? Will negó.
– No alfa, debe haber un malentendido. Nunca mandé a buscar a su hermano.
El corazón de Dixon palpitó fuerte en su pecho.
-¿Y quién está con Clara?- una pregunta bastante considerable dado que la loba ya había tenido tres intentos de asesinato. Tenía tendencia a buscar su muerto y eso era algo que los dos lobos no podían permitirse.
-Sola-fue lo que respondió Ethan con voz ahogada.!
En eso un estremecimiento los recorrió a los dos. Miedo, pánico, terror, dolor. Emociones que no eran de ellos, pero las sintieron muy dentro. Y fue como aquella vez. Los dos se miraron, no necesitaron hablar. Su loba estaba en peligro. Ambos salieron corriendo en dirección a la casa. Solo la había dejado sola por poco tiempo y ahora…
Las patas de los dos lobos apenas tocaban el suelo. Ambos cuerpos corrían rápidamente, por sus mentes pasando lo peor, deseando que cuando llegaran Clara estuviera en el cuarto, esperándolos
enredadas entre las sábanas. Pero con solo llegar y ver que la entrada no estaba custodiada ya se dieron cuenta que algo no estaba bien. Y sus temores tuvieron validez cuando al entrar a la habitación la encontraron sola. Clara no estaba.